29 ago 2012

La ouija, el espiritismo y el más acá

Nota:  el formato que tiene es porque lo escribí en otro lado y luego lo traslade al blog, y así ha quedado. 

Ahora me concentraré en desmentir porque la oui-jaja, no es un teléfono del más allá que nos sirve para contactar con fantasmas, espíritus, almas en pena, etc., si no que se debe a que la gente que lo juega son los que influyen, son ellos, los que están en el más acá, quienes provocan todo.

El origen del espiritismo, o la nueva moda del siglo XIX para pasar el rato.

Muy rápidamente comentó, (voz tenebrosa on): ¡el origen!, muahaha (off), recordemos que por aquella época no había televisores, ni radio y lo que habría para entretenerse era el poder sobrevivir, salvo si eras de la clase acomodada o rica aunque con fastidiar a los de abajo tenían, así que el espiritismo “lo petó”, ¡era la sensación!, llegando a todas partes, como lo son hoy algún deporte, otros eventos sociales, o los memes, aunque comparado con la restauración de doña Cecilia… podría quedarse como mero fenómeno local. 

La restauración como fenómeno social, místico e inexplicable.

Prosigamos, finales del siglo XVIII y s. XIX, las hermanas Fox, Kate y Margaret dos pequeñuelas de 11 y 14 años respectivamente, que no se les ocurrió otra cosa que gastar una broma a sus padres con una manzana y un cordel, y el juego era que había un espíritu en su casa, el fenómeno se extendió que se fundó el espiritismo, ahora sí ya era oficial, la religión era una birria, comparado con la nueva religión, ninguna otra religión había daba un servicio al cliente tan completo y satisfactorio como era contactar con tus parientes muertos (parafraseando un poco a Ramón Nogueras), un éxito, ¡señores! no falto quien lo tachó de brujería y que aquello no era posible, si la religión diciendo que aquello no era posible y que el diablo “patatín, patatán, bla, bla”, ¡que nos quitan los clientes! pensaría algún eclesiástico, el marketing del espiritismo funcionó, tenían lo mejor de las religiones, además de la nueva novedad y el hecho de que las personas tengan predisposición, favoreció dicho auge.

Lo que no sabías…
Primero fueron mesas giratorias o danzantes, (no, no volaban), porque los espíritus no se les ocurría otra cosa que moverlas, ¿para qué? parece que les indicaban a los vivos que las mesas no estaban bien ubicadas con el resto de la decoración, tenían gustos exquisitos estos fantasmas. En este caso, se dejaron de usar porque el reverendo N.S. Godfrey (1853), dijo que las mesas estaban poseídas, ¡que miedo! después de aquello el espiritismo tuvo que buscar otra manera de comunicarse, llegó la famosa oui-jaja 

 Así eran las mesas giratorias. ¡Muévete con ritmo!

Michael Faraday, sí el famoso Faraday, importante en la historia de la ciencia y además, un creyente (en dios), demostró que aquello era falso, como buen escéptico sobre el espiritismo, puso a prueba cómo es que se movían las mesas, no detallaré como llevó acabo todos sus experimentos, simplemente encontró lo que hoy conocemos como, el efecto ideomotor, pequeños movimientos inconscientes de las personas, y que otros muchos han hecho experimentos encontrando el mismo efecto, sí en ciencia hay que repetir, reproducir los experimentos.

Nuestro cerebro está anticipando los movimientos (10 segundos antes), previendo cual será el siguiente movimiento para que estés preparado, y tú sin ser consiente de ello, ya ha iniciado el movimiento, si vas a tomar un taza de café que tienes en una mesa, “él” habrá preparado el brazo tuyo.  

Muchos rechazan/rechazaban que sus mensajes recibidos por los muertos, no sean debidos al efecto ideomotor, ¿había algo más?, ♪ tiruriru tiruriru ♫ en el apartado de “no pienses en osos blancos” os lo explicaré…

Los requisitos; con las mesas (también con la oui-jaja), es que la gente cantará u himnos, estuviera distraída hablando con los demás pero sin dejar de tocar la mesa y evitar movimientos bruscos, esto hacía que la carga cognitiva favorezca la aparición de los movimientos inconscientes, sin este proceso veréis que las mesas no se moverán ni un ápice (y lleva su tiempo), por supuesto otro requisito es el tipo de mesa, no vale cualquiera.

Las mesas pasaron a segundo plano, y se empezó con la oui-jaja “la primitiva”, no la que tenemos en mente que es la tabla, eso fue algo posterior, el efecto de mover el vaso, es el mismo que con las mesas, ¡todos alrededor y tocando levemente el vaso! pero ahora añadimos letras, números, el sí y el no, un clásico, que así lo hace más atractivo y más variado, para ver como nos responden nuestros amigos fantasmales, parientes o famosos si queréis contactar con Cleopatra o Elvis (sí, está muerto, lo siento), ¿por qué no prueban con Yisus?, y parece que los fantasmas conocen todas las lenguas posibles, y nosotros aprendiendo durante años diferentes idiomas, ¡ahorra ese esfuerzo y espera a estar muerto! y vuelve en forma de fantasma conseguirá trabajo.     

¿Tenéis miedo a jugar a la ouija?, ¿por los fantasmas del ultramundo? ellos quieren contactar con vosotros y contarles que os quieren, o en el peor de los casos os dirán que os va a ir mal, también cabe la posibilidad de que os digan frases incoherentes, o palabras sueltas o ni eso serán letras sin sentido, dará igual que ahora resulte incompresible o sin significado alguno, vuestros cerebros rellenarán y moldearán las situaciones futuras para hacer coincidir ese evento fantasmagórico, a lo largo de semanas (u años) haréis encajar esas piezas como un puzzle, dichas frases incoherentes son vuestras piezas, vuestro puzzle a completar será: la vida.
Un juego de la Parker brothers no es para tomárselo en serio.

Envidiosos, e ¡incrédulos!

Los espíritus y dios son casi lo mismo, no hay evidencia alguna pero tienen muchos seguidores.

Como curiosidad, la palabra ouija muy probablemente sea una yuxtaposición entre “oui” del francés y “ja” del alemán, ambos tienen el mismo significado.

Explicación psicológica, porque te gusta engañarte a ti mismo y nuestro cerebro es a veces un “amiguete cabroncete”.

Nos fascina lo sobrenatural, existe una tendencia predominante (el enlace de correlatos neuronales), y hoy muchos creyentes siguen con esas creencias y otros no creyentes que tienen esas tendencias (aunque diga que no existen los dioses), pero sí piensan que hay cosas paranormales, y desean aferrarse a la consoladora idea de sobrevivir a la muerte.

Podéis ser escépticos de que el infierno/cielo no existe pero cuando se trata del más allá: “¡eh! ¡hoyga! no nos pasemos que la ciencia está limitada, ocurren cosas inexplicables misteriosas, místicas, y SI es posible un mundo espiritual” ... y un mundo de unicornios, hadas, piruletas con un cielo de color de rosa, no hablamos de lo que uno desea, wishful thinking o (pensamiento ilusorio)si no de lo que se puede probar, y demostrar (la tetera de Russell, explica ese falaz pensamiento), pero el hecho que desconozcas o ignoren lo que se sabe, simplemente muestra, eso, que lo ignoras, es una falacia ad ignorantiam, porque se ha dado explicaciones desde la psicología (y variantes) de que el mundo de los espíritus no existe, es cosa del cerebro, social-cultural, y otros fenómenos naturales que lo explica la física. Y ¿si hay algo sin explicar? pues espera un poco puede que se deba a una explicación racional que no a una fantasía, pero ahora mismo se ha explicado el 99% o el 100%.

-Recordemos que la memoria, no es de fiar y se puede inducir con facilidad falsos recuerdos (Elizabeth Loftus, puso a prueba la memoria y encontró ese defecto), cuando accedemos a un recuerdo ¡esté se modifica!, cuando recordamos, estamos influyendo con nuevas creencias, nuevos pensamientos, nuevas emociones, evocar un recuerdo es alterarlo. En otro momento os contaré el experimento de Elizabeth Loftus y con que facilidad se induce un falso recuerdo, esto puede ocurrir en grupos de desconocidos (viendo un objeto en el cielo y cada uno dando su opinión), familiar, social, etc.

-El famoso sesgo confirmatorio y el los falsos recuerdos os harán la trampa, ambos, tienen un papel imprescindible para confirmar vuestras creencias o lo que ocurrió aquel día que jugaron a la ouij-jaja, si hubo una palabra que era lápiz, y no ha habido ningún significado especial en vuestra vida cotidiana este se olvidaré u omitiréis la información, en cambio un evento con: la palabra lápiz + daño, resulta que alguien de vuestro entorno le ocurre algo con un “bolígrafo” tenéis probabilidades de asociar la oui-jaja y decir: ¡la oui-jaja acertó! olvidareis que realmente la palabra era lápiz, porque ambos ítems entran en la misma categoría de “objeto de oficina”, efectivamente categorizamos la realidad. 

Nuestra memoria es una mierd* y el cerebro no te va ayudar, te va engañar, te dará una explicación, porque la necesitas, no le/te gusta la incertidumbre de no saber que pasó, y te dará una explicación mala pero es mejor tener una a no tener ninguna y se conforma con cualquiera, una creencia.

No pienses en osos blancos. Wegner y el efecto rebote. 

Automáticamente cuando se te dice: no pienses en osos blancos, verás que no podrás evitarlo, y esto sucede con los movimientos y en otras áreas cotidianas que no sean con el espiritismo.

“El estudio de Wegner demostró que el efecto rebote convertía a las mesas giratorias y las tablas ouija en elementos especialmente engañosos. Al intentar mantener las manos lo más quietas posible y distraerse de lo que tenían entre manos, la gente creaba las condiciones perfectas para fomentar las acciones ideomotoras, de ahí que fueran tan proclive a obtener resultados espectaculares”(p. 142. R.Wiseman)

El estudio de Wegner consistía en que la mitad de los participantes tomarán un péndulo y decirles que no hicieran movimiento alguno, al otro grupo que lo sostuvieran por encima de una cámara (los estaban grabando para registrar el movimiento), bien, el simple hecho de prohibirles al primer grupo que no se movieran, ¡incremento el balanceo! En otro experimento posterior, los movimientos inconscientes se podían incrementar aún más si se les decía a los participantes que contarán hacia atrás, lo que tiene relación con el hecho de cantar y hablar en las sesiones espiritistas, lo que sería la carga cognitiva.

Y, no, no había ningún espíritu cerca, Wegner, no les invito a las pruebas. Wegner, ¿por qué discriminas?

¿Eres una persona sugestionable?
Eres mío y podré engañarte con facilidad como cualquier desarmado charlatán, si aplico ciertos principios/estrategias psicológicas, así de claro, lo que pasa que yo te advierto de que hay gente que los aplica sin darse cuenta o dándose cuenta de ello. Sí soy un buen ilusionista, podré influenciarte y llevarte a mi terreno, y si soy un charlatán te sacará el dinero, el primero sabes que te van a engañar y has pagado por ello y sabes perfectamente que es un truco pero no sabes como lo hace, pero el segundo es el mismo truco algo más rebuscado porque lo adorna con palabrería pues busca engañarte, y tú como un simple mortal te dejas llevar por la fantasía, porque es “cool, bro”, tú cerebro desconecta el raciocinio, aparte de susurrarte al oído: “esa persona de enfrente es buena” ¡ZAS! ¡Bazinga! te tiene en el bote.

Cómo sabes realmente que eres sugestionable, primero porque no te has podido informar de todos los embustes de lo paranormal y te lo crees, sesgas la información (sesgo confirmatorio) pues vas a los “himbestigadores del paranormal” y estos muestran evidencias “ridículas” ambiguas, etc., crees que existen algo inexplicable, por ahí empezaría, pero se puede solucionar, “la ignorancia se cura”, sí eres de los que por más evidencias u explicaciones racionales se te dan sigues en tus trece, olvídate tu predisposición y tu cerebro te han tendido una trampa (it’s a trap!), un creyente creerá siempre o lo dejará de forma paulatina.

En otro momento me extenderé con las personas sugestionables y que estrategias psicológicas se aplican para que te lo creas.

¿Eres de los que han jugado y no tienen explicaciones para cosas que te sucedieron? u otros sucesos.

NO, tú no eres una evidencia de que existen los fantasmas, ni los creyentes evidencias de un dios porque lo han sentido, ni por fe, una evidencia anecdótica no es fiable y menos en estás cuestiones. “La persona más fácil de engañar es uno mismo” Edward Bulwer-Lytton.
Se lleva más de 100 años poniendo a prueba las afirmaciones paranormales, y de forma rigurosa, nunca arrojan resultados positivos, te suelen presentar como evidencia otras personas y no se dan cuenta que suelen deberse a fallas del cerebro (percepción), sesgos, y que hay explicaciones de fenómenos naturales ya constatados.
Otra cosa más extenderse en otra nota.

Trucos para desmentirlo y susto para tus amigos:

¿Tenéis una tabla o algo hecho por vosotros?

En el primer “experimento”, vas a jugar con normalidad, a no ser que realmente pienses que te vas a sugestionar, en tal caso, ya no podrás seguir bien con la prueba, si crees que es tú caso, prueba a pasar a los experimentos y a la preparación.

Para no contaminar el experimento
Decirles a vuestros amigos que queréis descansar un rato o que prefieres observar como ocurre la primera sesión que empiecen ellos y que luego te animarás, no os preocupéis los muertos hacen cola para hablar con ustedes, no tienen otra cosa que hacer.

-Juega con normalidad:
En ambos casos de ouija casera o tabla intenta saber con que “fantasma” habláis, probar con alguien ficticio, Goku es una buena opción, o como comentaré más abajo con Newton, y si no preguntar directamente pero pensando que es alguien ficticio. Aquí dejaos llevar, hacer preguntar y a ver que va respondiendo. En la parte de precaución explico porque no es recomendable en principio hacerlo con un fallecido de alguien, lean sobre ello.

-¿Ouija casera?

Experimento control, en tu casa prepara todas las letras del abecedario y números (incluso puedes hacer un dibujo, una carita o escribir algo así como: “¡os he engañado, creced!” esa frase será sorpresa dependiendo de la pregunta que realicen y coincida), sigamos los papeles tienen que tener el mismo tamaño y que encaje con las letras de la ouija casera si puedes desordenarlas las letras y los números mejor para que sea todo aleatorio, obviamente tus amigos no estarían presentes en todo el proceso.

Con esos papeles, ponlos en una urna o caja para cogerlo de forma aleatoria (no hagas trampa) y procura no ver la letra o el número intenta que sea un papel grueso para que no se trasparente, irás colocando cada uno encima de las letras o números de tu ouija casera, “pégalas” bien para que en la sesión el vaso no las mueva, y luego ten en cuenta que tendrás que retirarlas, vete anotando a que lugares se ha ido posando el vaso. Es evidente, que en esta parte no podrás jugar, porque vas a ir anotando los movimientos, si te resulta más fácil en los papeles creados por ti, en la parte posterior coloca números (mejor opción).

Realicen un par de preguntas, cuando acaben, comprueba que letras y números se han seleccionado con el vaso, cuando intentes recomponer las respuestas dadas por el fantasma, tus amigos y tú se sorprenderán porque verán lo mismo, no habrá ningún sentido, si el fantasma fuera listo se daría cuenta donde quedaría cada papel que has puesto al azar y tendrías frases o palabras coherentes.  
Si hay gente que se queja y dice que el fantasma no puede ver las letras, entonces dale la vuelta a los papeles (quita el papel de broma si lo has hecho), y ahora ponles una venda en los ojos, procura que ninguna vea por la rendija de la parte inferior de la venda (algunos son muy tramposos), ahora proceder como antes y vete anotando donde se va posando el vaso, verás nuevamente las incoherencias, si ellos no se fían de ti, grábalos con el móvil o con lo que se te ocurra para que vean que ha sido de forma aleatoria.

Puedes ser original y crear tu propio experimento control.

-¿Tenéis una tabla?

Lee la ouija casera, para ver lo que tienes que hacer, habrá muy pocas variantes. Cuando hayas colocado de forma aleatoria las letras y números o incluso una frase para tomar el pelo a tus amigos, dale la vuelta a la tabla. Tampoco en esta versión podrás jugar y ¡empiecen a jugar! pasará lo mismo, palabras, números incoherentes.  

Si resulta que coinciden deletrear algún nombre, alguna palabra que sea una respuesta coherente con la pregunta, por favor, sal de esa casa y reza a monesvol.  

Precaución.
Mejor que empiecen con “fantasmas” famosos o personajes ficticios, prueben con Newton y pregunten si efectivamente es él, si lo hacéis pensando en personas fallecidas tendréis el problema de que alguien se sugestioné y un puñado de lagrimones (ahorren eso, si vuestra intención es divertíos, si no a pasar miedo), o también “provocar” algún brote psicótico en alguno de los participantes (no necesariamente debido a la ouija, si no la persona ya lo sufría), o se lo cree tanto que piense que esté poseída y os llevéis un susto por parte de dicha persona, rara vez (o con pinzas que sucede) esto último… igual si la persona no tiene ningún problema mental, se de cuenta de que ha hecho el panoli y en futuras interacciones sociales sienta tal vergüenza por su comportamiento que no admita que fue cosa del momento y algo así no es fácil de sobrellevar, así que para preservar su imagen (autoestima, y autopresentación ante los demás), siga diciendo que fue real, cuando es mentira, termirá esa misma persona creyéndoselo.    

No es la ouija, tú charlas contigo mismo, procura hablar más a menudo dices muchas incoherencias.


*Faltan enlaces, se irán añadiendo.

Referencias
El origen.











Libros:
Richard Wiseman. (2011) ¿Esto es paranormal? por qué creemos en lo imposible. Primera edición, Barcelona: RBA Libros.
Sobre la memoria:
Anderson, J. R. (2001). Aprendizaje y memoria. Un enfoque integral. Segunda edición, Méjico: McGraw-Hill. Capítulos 1, 2, 3 y 4.